Después de su megayate en forma de cisne de 2020, el estudio de diseño Lazzarini regresa con un superyate de 328 pies de eslora (unos 100 metros) que cuenta con un puerto privado para embarcaciones pequeñas. Llamado “Saturnia”, el concepto de superyate está concebido para ser construido íntegramente con estructuras de fibra de carbono seca para hacerlo un 50% más ligero que los barcos de tamaño similar, y para alcanzar una velocidad máxima de 30 nudos.
El cuerpo principal de Saturnia se subdivide en cinco pisos más el área de la antena superior. La embarcación se puede configurar en diferentes diseños, con capacidad para entre 10 y 20 suites para invitados y 20 miembros de la tripulación.
El concepto de Lazzarini presenta un área de cubierta transitable y aberturas en ambos lados que se levantan para revelar un puerto privado para licitaciones. Las embarcaciones con hasta 1,5 metros de calado pueden atracar en el interior del puerto privado o cargarse fácilmente mientras el yate está navegando.
Dentro del puerto privado ubicado en el centro, las grandes ventanas corredizas maximizan la conexión con el exterior. Mientras tanto, las aberturas laterales pueden extenderse desde la cubierta superior a las áreas de descanso con suelo de vidrio transparente.
Diseñado con propulsión híbrida, el yate utiliza motores diesel y un sistema de chorro de agua electrónico central, que puede empujar el yate con cero emisiones. El estudio de diseño Lazzarini estima que el concepto de superyate Saturnia podría construirse por 300 millones de dólares en unos 30 meses.