Yusaku Maezawa es un empresario japonés propietario de, entre otras muchas cosas, diversas empresas de comercio electrónico. Además, puede que a alguno le suene su nombre porque, en el año 2023, será el primer civil que viaje al espacio con la compañía SpaceX, propiedad de Elon Musk.
Y como parece ser que el señor Maezawa no tiene suficiente con dirigir empresas multimillonarias y programar viajes especiales (un viaje para el cual invitará a 8 desconocidos para que le acompañen), le encargó a Rolls-Royce y a la firma Hermès un coche muy especial, uno con la calidad y el prestigio del fabricante de automóviles inglés, pero con la elegancia y la delicadeza de la casa de moda francesa especializada en trabajos con cuero.
¿Y cuál es el resultado de ese encargo? El Phantom Oribe, una muestra de artesanía y exclusividad al alcance de solo unos pocos. Un automóvil inspirado en las líneas de la aviación (Maezawa lo pidió a juego con su jet privado), que combina detalles de oriente y occidente.
Con un exterior creado en colores crema y Oribe Green (inspirado en la antigua cerámica japonesa, y un interior dominado por un opulento cuero Hermès Enea Green que cubre los asientos, el volante, la palanca de cambios y otros elementos del vehículo.
A eso habría que sumar el frontal y los detalles de madera tallada a mano a partir de un diseño del artista francés Pierre Péron. Como ven, ningunead detalle se ha dejado al azar en este coche, que incluso cuenta con ribetes Hermès para completar los reposacabezas, o alfombrillas fabricadas con lana de cordero.
